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Empezar el jardín o el colegio, todo un reto en la crianza
María Patricia Sarassa V.
Lic. en Didáctica y dificultades del aprendizaje, puericultora, Mg. en Psicopedagogía. Febrero 8 de 2019
Muchos de nosotros nos enfrentamos al temor, ansiedad, incluso culpa, cuando nuestros hijos empiezan su proceso escolar. Muchas son las dudas y preguntas que nos asaltan: ¿estará preparado mi niño para este proceso? ¿Es el momento? ¿Será que espero otro tiempo? ¿Será que lo cuidarán igual a como lo cuida mi mamá (la abuelita)? Es una decisión difícil para todos los que somos padres pero algunas consideraciones, nos pueden ayudar en este proceso.
¿Qué es la adaptación escolar?
Es un proceso en el que los niños y las familias, se integran y se acomodan a un lugar nuevo, con personas y actividades desconocidas.
Requiere de tiempo y depende de muchas variables: temperamento del niño, historia familiar y de pareja, contexto familiar actual (tiene hermanitos, separaciones, duelos). Esto significa que cada proceso es diferente; cada niño y cada familia viven la experiencia de una manera particular.
¿Qué significa la adaptación escolar?
Para los niños. Se encuentran en un lugar desconocido, con personas extrañas, actividades y materiales poco familiares. Deben acogerse a rutinas diferentes a las de su hogar, crear nuevos vínculos afectivos; explorar y conocer juegos, materiales y relacionarse con otros niños, por lo que en ocasiones pueden sentir temor o generar ansiedad.
Es posible que presenten cambios en el comportamiento habitual en casa, tales como: irritabilidad, “pataletas”, inapetencia, exaltaciones en el sueño, entre otras.
Para los padres. Significa delegar el cuidado y acompañamiento de sus hijos por un determinado tiempo a otras personas que no conocen. Comprender y asimilar el crecimiento y desarrollo de sus hijos: ampliación del entorno social «de la familia, al jardín», paso importante de independencia y autonomía En algunas familias, esta “vivencia”, puede generar tristeza, temor o culpa.
Para los jardines infantiles o colegios: acompañar de manera coherente, amorosa y respetuosa las manifestaciones de extrañeza de los niños; validar sus sentimientos y emociones; propiciar experiencias que promuevan la socialización, la expansión de la creatividad y la autonomía. Demostrarles seguridad y comprensión.
Ofrecer a las familias información completa de la institución, realizar jornada de inducción sobre el proceso de adaptación; brindar apoyo y confianza para asumir así responsabilidades compartidas.
Claves que facilitan la adaptación escolar
- Mantener una comunicación permanente y adecuada con el Jardín infantil.
- Antes de salir hacia el Jardín Infantil, explique al niño, de manea breve y sencilla hacia dónde se dirigen y porqué.
- En lo posible, la persona más tranquila del hogar debe llevar al niño al Jardín.
- Es natural que los niños demuestren temor y negación para ingresar al jardín, que lloren y se aferren a quien los entregue; todo es nuevo para ellos, por tanto, sugerimos mantener la calma, comprender sus sentimientos diciéndoles por ejemplo “entiendo que estas triste porque no vas a estar con mamá o papá”; expresarles frases positivas como, “vas a conocer nuevos amigos”, “tus profesoras te van a cuidar”, “yo estaré preguntando por ti”, “nos veremos más tarde”.
- Despedirse de manera corta. Muestre seguridad y confianza.
- Nunca, se ausente sin despedirse, aunque suene tentador. Puede generar angustia y sensación de abandono.
- Si el proceso del niño lo requiere, realice una adaptación progresiva aumentando paulatinamente el tiempo: unas horas al principio y luego la jornada regular.
- Si el proceso se vuelve largo o difícil a pesar de acatar las recomendaciones ofrecidas por el personal docente, busque asesoría adicional.
- Regular paulatinamente horarios y rutinas de sueño, higiene y alimentación.
- Evitar modificar espacios y escenarios adicionales a los necesarios al ingreso al Jardín, mientras se adapta.
- Conversar con los niños, sobre la experiencia del ingreso al Jardín, sin abrumarlos con demasiadas preguntas.
Lecturas Recomendadas
Argos, J., Ezquerra, Mª P., Castro, A (10 de enero de 2011). Escuchando la voz de la infancia en los procesos de cambio e investigación educativos. Aproximación al estudio de las transiciones entre las etapas de educación infantil y educación primaria. Revista Iberoamericana de Educación, (54/5).
Confederación Española de Centros de Educación Infantil (CECEI). (2017). Estudio científico del período de adaptación. Recuperado de http://waece.org/contenido/noticias/?p=103.
Fundación Bancolombia, Alina Consultorías. (2015). Modelo de transiciones exitosas en la primera infancia de la fundación Bancolombia. Todos los niños y niñas transitan y los entornos se articulan para acogerlos. Guía de acompañamiento para su implementación.
Menéndez, S., Jiménez, L., & Bárbara, L. (2008). Familia y adaptación escolar durante la infancia. Revista Educación, Universidades de Huelva y Sevilla, (10), pp. 97-107.
UNICEF., (2012). Preparación para la escuela y las transiciones. Una publicación complementaria del Manual de escuelas amigas de la infancia.
Vogler, P., Crivello, G. y Woodhead, M. (2008). La investigación sobre las transiciones en la primera infancia: Análisis sobre las transiciones en la primera infancia: Análisis de nociones, teorías y prácticas. Cuadernos sobre Desarrollo Infantil Temprano Nº 48. La Haya, Países Bajos: Foundation Bernard van Leer.
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